China construye un estadio en Costa Rica para la estrella del pop latinoamericano

Una delegación de 170 empresarios chinos, presidida por el vicepresidente del Consejo Chino para la Promoción del Comercio Internacional (CCPIT), Zhang Wei, llegó el pasado 24 de marzo a Costa Rica para firmar el Tratado de Libre Comercio entre ambos países y celebrar una cumbre empresarial de tres días. En el medio, se hicieron un espacio para estar presentes en la inauguración del suntuoso Estadio Nacional, con capacidad para 35.000 espectadores, donado por China y en el que el próximo 10 de abril se espera el concierto de la reina pop latinoamericana, Shakira.

Con montañas selváticas que bajan hacia las costas de ambos océanos, 4,5 millones de habitantes y una superficie que es tres veces el área de Pekín, las diferencias entre China y Costa Rica no pueden ser mayores. Sin embargo, la relación entre ambos se estrecha a una velocidad sorprendente. Costa Rica rompió relaciones diplomáticas con Taiwán en 2007 y en sólo tres años firmó el Tratado de Libre Comercio (TLC) con China (el tercero con Latinoamérica después de Chile y Perú).

Para agradecer este gesto, China financió y construyó el Estadio Nacional, donde los seleccionados de fútbol de ambos países empataron 2 a 2 durante la inauguración, en la que previamente se presentaron varios espectáculos culturales chinos. Quizás podamos entender por qué tanta generosidad por parte de China analizando la situación de Centroamérica.

China y su nueva relación económica con Costa Rica

Esta región es la más pobre del continente y ha sido históricamente sometida por Estados Unidos. En los años 80, El Salvador, Honduras y Guatemala (Nicaragua estaba inmersa en una guerra civil), buscando una salida a la crisis económica, se dedicaron al outsourcing en el ramo textil para marcas de Estados Unidos, pero en los años 90 se encontraron rápidamente sobrepasados por la competencia China. Además, estos cuatro países (más Panamá) están entre la veintena de naciones que reconocen como estado a Taiwán (cuyo nombre oficial es República de China). Esta relación no es muy importante en términos de intercambio comercial, pero cada vez que se ha producido alguna catástrofe natural Taiwán ha llegado con ayuda.

Por aquellos años ochenta, Costa Rica, que ha sido tradicionalmente un país cafetalero y cuenta con una riquísima biodiversidad, promovió otro tipo de relaciones con Estados Unidos. Invitó a las corporaciones biotecnológicas de ese país a realizar investigaciones de su flora y fauna (los que no son demasiado jóvenes recordarán Jurassic Park, que fue rodada en Costa Rica). Al mismo tiempo, promovió el turismo y se convirtió en el lugar preferido por los norteamericanos para pasar una temporada en la playa y recorriendo las montañas. En 1998, otro emprendimiento estadounidense abrió las puertas para la entrada de China a Costa Rica. La empresa norteamericana Intel montó una fábrica de componentes para computadora destinada al mercado de lejano oriente. Actualmente casi el 90% de las exportaciones de Costa Rica a China la constituyen las ventas de Intel.

Empresas chinas desembarcan en Costa Rica

Ahora, ¿cuál es el interés de los 170 empresarios venidos desde China? Por un lado, Costa Rica puede convertirse, al igual que México, en un puente para vender a Estados Unidos. Por otro, el país limita al sur con Panamá. “Quién sabe, en la de menos pronto veremos a los chinos construir la ampliación del tranvía panameño a Costa Rica, una carretera común de al menos seis carriles, entre otras cosas” escribió en un reciente artículo la presidente de la Cámara de Exportadores de Costa Rica, Mónica Araya. “Esperamos que los costarricenses sepamos valorar el esfuerzo y no pongamos piedras en el camino del fortalecimiento entre los lazos con Panamá y el Gran Dragón.”

Por otro lado, aunque se han empezado a negociar los primeros acuerdos para la exportación de carne, azúcar, café y leche en polvo, los proveedores “ticos” sólo podrían abastecer a no más de una ciudad china (y de las pequeñas). La Presidente costarricene, Laura Chinchilla, en su discurso de inauguración de la Cumbre Empresarial parecía más interesada en otros temas. Se refirió sobre todo a las inversiones chinas en Costa Rica:

“Esperamos que los empresarios chinos no solamente se hermanen con las empresas privadas, sino también con las públicas y que se conviertan en verdaderos socios que nos ayuden a impulsar de manera conjunta y mediante alianzas estratégicas la ambiciosa cartera que este gobierno se ha propuesto concretar”. “En promedio representará entre 2.000 y 3.000 millones de dólares anuales, hablamos de inversiones en carreteras, puertos, energía y turismo”.

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